En la actualidad, en el proceso de una emergencia de salud mundial , muchos de las dotaciones utilizadas en las empresas se centraron en utilizar telas antimicrobiana y anti fluido, esto debido a la necesidad de mantener las condiciones sanitarias en las instalaciones de las empresas para ayudar a promover entornos de trabajo limpios e higiénicos, hoy te queremos compartir algunos de los aspectos principales de este tipo de telas, ya que hacen parte de la materia prima de nuestra línea de bioseguridad.
Empezaremos hablando de la tela anti fluido, este tipo de tela de fibra sintética, con características por su composición, permitiendo crear un escudo especial que protege contra salpicaduras accidentales de líquidos.
Es una tela de 100 % poliéster que tiene un respaldo de plástico con una fina capa impermeable. El laminado de Poliuretano es un tejido completamente impermeable, además de ser transpirable y flexible, gracias a sus características se han confeccionado diferentes elementos de dotación utilizando esta tela para mantener la protección sobre los equipos de trabajo en las empresas.
¿Qué es la tela antimicrobiana?
Un tejido antimicrobiano es un tejido que ofrece protección contra bacterias, moho, hongos y otros microbios peligrosos. Esto se puede lograr tratando la tela con un producto químico tópico patentado que inhibe el crecimiento de patógenos o usando hilos diseñados para proporcionar una funcionalidad antimicrobiana microscópica inherente. En general , estos hilos combaten el desarrollo de microbios al mismo tiempo que promueven el movimiento de la humedad, maximizando así la comodidad y prolongando la vida útil del tejido.
Una de las razones por las que las telas de material antimicrobiano son tan efectivas es que, al eliminar este peligro, evitan la propagación de patógenos peligrosos, lo que reduce el riesgo general de infección en un hospital u otra área donde el la seguridad es esencial.